julio de guernica

Espera

Entre las llamas doradas

y los leños crepitantes,

con una copa de vino

y mucho fuego en la sangre;

esperando tu llegada,

está mi amor anhelante.

Me están temblando las manos,

del deseo de tocarte,

en un furioso latido

el corazón se me sale

del pecho, en veloz carrera,

porque quiere ir a buscarte.

Voy a morderte los labios,

con mis besos ahogarte,

mientras te quito la ropa

con las caricias más suaves.

Voy a bajar por tu cuello,

para en tu piel impregnarme,

con el roce de mi boca

recorriendo cada estambre

de tu cuerpo que me embriaga

en perfumes celestiales.

Quiero ser nave en tu puerto,

ser ofrenda en tus altares,

escalar todas tus cimas,

descubrir todos tus valles,

penetrar todas tus puertas,

y de tu néctar saciarme.

No ves que ya no resisto,

la tortura de esperarte;

cada minuto que pasa

se incendia mi alma al soñarte;

te aguardan caricias nuevas,

que nacieron para amarte;

y la fiebre de mil besos

que se harán fuego en tu carne.

Ven… detengamos el tiempo…

Que esta noche no se acabe,

Que el fulgor de tu belleza,

me queme siempre la sangre;

Que tu amor sea infinito

como es mi sed de adorarte…