Estábamos hablando por teléfono,
Que como estabas ?, te preguntaba,
si el frio de la tarde te dejaba pensar,
pensar en mis palabras de ayer
llenas de amor y placer de escucharte otra vez.
Que como te sientes cuando no estoy contigo
Y solo sabes de mí cuando te hablo desde mi corazón,
Como un niño buscando cariño.
Siendo tu voz la única que calma mis ansias
De verte, de que estés conmigo.
Es como si nunca te hubieras ido
Y el sol de la tarde te dijera que aun espero verte,
Para ver juntos un atardecer bajo el calor de mi abrigo.
Pero hoy solo puedo sentir tus palabras
Y tratar de acariciarte con mi voz,
Sentirte solo del otro lado de la línea,
Con tus frases de amor,
Diciéndome cuanto me extrañas,
Cuanto me quieres cuando la soledad de la noche
llega a tu nido.
Para así quedarnos despiertos esperando que pase rápido la noche,
Y amanezca pronto un nuevo día,
Donde finalmente tendré tus besos, tendré tu calma,
Tendré tu abrigo y tu tendrás un amante, un confidente,
un amigo.