Poco a poco se dio.
Poco a poco fui cambiando
Aun recuerdo cuando me dijiste: no me digas que te pasa.
No me digas, te amo.
En ese momento me comencé a perderme.
Fui perdiendo mi voz.
Surgió la pregunta ¿que le puedo decir?
Después me dijiste: no compartas tus versos.
Me dejaste de querer a mi, querías a un mudo.
Sin expresiones, sin un palpitar.
Intente de ser esa persono
Intenté complacerte, hasta el punto que me odio yo mismo.
Ahora estoy aquí, en está prisión.
Sigo con una rosa que lleva tu nombre
Escribo versos que llevan tu nombre.
Si pudiera gritar, gritara tu nombre.
Le cuento mis historia a una taza de café.
Me enseñaste a guardar silencio