Tu boca pequeña llena de besos
pero lo que más prefiero
es cuando florece tu sonrisa
entre tus labios ligeros.
Con ella alimento el alma
un año entero.
Tu boca pequeña llena de deseo
yo la beso, la muerdo
El cielo está tan alto que te pierdo,
pero no es lo que quiero
los dos juntos, enteros.
El cielo es eterno y pequeño
para tu enorme sonrisa de libre vuelo.
A menudo las mañanas están llenas de viento de luz y de risas.
El cielo se acercó y grité alborozado y mis manos a ti se aferraron.