SABE DIOS.
Cuanto te amo sabe Dios,
lo que tú no quieres saber,
oyes cuanto te clama mi voz,
más tu oído finge no atender.
Cuánto me amas no lo sabré
o si mi alma erra en tu saber,
pero inevitable el río al correr,
siempre en la mar suele yacer.
No importa tu amor indiferente,
si mi alma ama tu indiferencia,
y si así soy feliz verdaderamente.
¿Qué importa ya tu displicencia?
Sabe Dios de este amor imposible,
en un corazón que se niega amar
y con entereza lo hago sostenible,
en este corazón que espera tu llegar.
Qué importa el camino por andar,
ni el tiempo que detener no puedes,
el viento marcha y vuelve a retornar
y tú volverás si donde yacer no tienes.
Sabrá Dios entonces a tu llegada,
si este amor de hoy estará vigente
o te vea también con displicencia,
como un día… Te fui indiferente.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Abril 19 del 2020.