Déjame que te enseñe
azul oscuro e infinitos brillos
cantarte de verano su cielo
mirarte y hablarte bajito.
Déjame que te guie
verdes senderos profundos
caminar el campo despacio
respirar tu aire puro.
Déjame que te riegue
el patio azul de tu sombra
agua fresca y limpia
dar vida a tu ternura.
Déjame acercarme a ti
charlar de cosas vanas
reírme y hacerte reír
besarte y no despertar.
Déjame estar contigo
sentarme a tu lado mil ratos
sentir tu aliento, latido
de tu corazón desgastado.
Déjame sacar brillo
a cada instante a tu lado
recuperar tiempo perdido
que no pasé en el pasado.
Déjame sentir hormigueo
cuando te miro embelesado
estremecerme todo por dentro
quedarme entero enamorado.