En cierto jardín sin nombre
El destino puso muy cercanos
Un adusto pino y un frondoso rosal
No se sabe si nacieron juntos.
El pino crecía y crecía
Como queriendo alcanzar el cielo
Pocas ramas, pocas hojas, sin flores
Muy erguido sin mucha sombra.
El rosal frondoso y lleno de espinas
Hojas pequeñas y poca altura
Muy orgullosa echaba olores
Muchas flores de mil colores.
Decía el pino entristecido
Orgullosa vive mi vecina
Sus flores son muy queridas
En las fiestas a ella recurren
No hay cumpleaños sin flores
Ni enamorados sin sus aromas
Celebraciones y homenajes
En todas están sus colores.
Un día talaron el pino
En hermoso ropero y cofre
Fue hábilmente convertido
Hoy habita en un dormitorio.
Las flores del orgulloso rosal
Después de un día de adornar
Ya deshecha y marchita
A la basura van siempre a dar.
Todo en la vida tiene recompensa
La humildad es don de celebrar
El orgullo es de brillo pasajero
Vidas paralelas, finales paralelos.
Lima, 22 de mayo del 2020.