Carlos Eduardo

Tú, sí, eres poesía

 

Tú, sí, eres poesía,

ambigua

insuficiente

maravillosa

 

Disparos en penumbra

tu risa loca

el aire de tus ojos a las 6 de la tarde

en la vía férrea

 

Cómo no quererte

si tus palabras son luceros

como tus pechos

sueños dorados

 

Nunca pude enamorarte

las mil flores no alcanzaron

tenías ese deseo intenso de ser monja

le adorabas 

 

Hoy que ya es tarde

qué sentirías

tendrías delirios

esa era tu dulzura

 

Quiénes te visitarían

toda la curia

o los fieles

tu belleza los alumbraría

 

Con los años 

qué será de ti

una luz de esperanza

un sueño roto

o qué

 

No pude conocerte bien

o esto

está demás