Me crees si te digo que ya no me importa nada, es qué por más qué pienso ya mi mundo llego al punto de donde no tiene regreso. Dime a pesar de todo en que cuento contigo, que es lo que tú puedes poner en la mesa que me haga pensar diferente, antes de abrir la boca piensa bien en lo que me vas a decir, no quiero que digas algo que en realidad no sientas. Ironía de la vida es que nosotros los seres humanos tendemos en repetir la misma historia y nunca pensamos atrás hasta qué es demasiado tarde.