EHUR OHR

La gitana y el mar...

Quién diría mi gitana,

quien diría que aquel día…

tú te irías hasta el muelle...

con las ganas de dejarme,

con las ganas de alejarte…

de huir de mí…

de nuestra historia.

Desde ahí me abandonaste…para siempre,

te marchaste decidida,

te embarcaste convencida…

y en la nave de tus dudas…

emprendiste la jornada.

Fue un suceso arriesgado…

transitar en mar abierto…

deambulando mar adentro.

Naufragaste a la deriva,

pereciste en tu arrogancia,

el oleaje reprochó tu cobardía…

mientras yo desde la playa…

contemplaba con angustia el desenlace.

La impotencia me quería consolar de esta agonía...

y no pudo.

Fui incapaz de retenerte…

ya no pude protegerte.

Te ahogaste de repente en el olvido…

y te borraste del destino…

por tu ingrata decisión…

de apartarte sin adiós ni despedida.

Hoy la orilla de la playa

se ha quedado abandonada,

empapada de tristeza…

en un contexto despoblado,

se ha sentido desolada…

inevitablemente inconsolable.