El señor de las tinieblas
me a puesto una condena.
De pies a cabeza me ha atado
con cadenas.
Quiere tener mi alma,
pero yo se la di a mi reyna.
Me ha dicho que me tendrá en el infierno
hasta que le cumpla su deseo.
Pero yo prefiero pasar mil tormentos
que a quedarme sin su amor verdadero.
Soportaría los castigos del infierno
más no soportaría
perder a mi amor eterno.
Ni las llamas del tormento
acabarán con el amor que le tengo
a la mujer de mis sueños.