Zoraya M. Rodríguez

**~Ensayo: Pensando en Futuro~**

Ensayo: Pensando en el Futuro

 

¡Oh, vida!, ¿por qué te desparramas sin saber el futuro?. Si el futuro es incierto, ¿cómo es posible que no veas tu futuro verdadero?. Si la vida te ofrece caminar, pues, no desesperes en dejar todo por el todo. Cuando el futuro no se sabe ni se siente, ni se percibe, pero, se vive en el presente pensando en el futuro, siempre en futuro, ¿por qué?, porque lo que hagas en el presente se refleja en tu futuro, si siembras simientes espera siempre un rosal y sino espera lo contrario. Porque no todo se siente así, sino que todo se hace como nace, sólo vive bien, siempre pensando en qué estarás haciendo de aquí a cinco años, sólo recuerda y piensa que la vida es como una sorpresa que se viste de triunfo o se desnuda si no laboras como se espera a que tengas éxito. Si ocurre lo primero, pues, alégrate que eres de ese montón de afortunados, los cuales, poseen éxito por su propio mérito y sin trampas, y si ocurre lo segundo, sólo levántate, reviste el mundo y sabes que el mundo sea pequeño y tú inmensamente grande. Cuando en la insistencia se siente como la intensidad de creer en tu propio camino como en el destino o en el futuro porvenir. Nadie sabe su futuro, más que Dios, sólo se debe de tentar la buena o mala suerte entre su andar y su peregrinaje, a sabiendas de lo que puede o no puede ocurrir, pero, siempre obrando y pensando en el futuro. Conforta a tu alma, recuerda que el pasado es vivido, y el presente no ha ocurrido aún y que el futuro es a consecuencia de vivir en el pasado. Sólo recuerda la vida, y la vida es única, trascendental y muy especial. Vive lo que no has vivido y lo que aún no piensas en vivir, pues, la vida es una como una es la vida. Así, que viviendo te perfilas hacia el futuro no dejes pasar ni una hora en vivir y saber que el destino es prometedor como el mismo cielo. Sólo viviendo es como te aferras al único mundo, y así como vives vivirás, y así como sientes sentirás, lo que en la magia de vivir se da como pasaje de vivir sin ser certeza alguna. Sólo empieza por donde se comienza a vivir, pues, el desenlace es poder haber vivido bien y culminar con el legado que dejes sin abandonar la vida misma. Sólo sé fuerte como el bien común, como el mismo instante en que se dió por vivir, y por haber triunfado al fracasar, sí, al fracasar, porque sin el fracaso no hay éxito. Sólo adéntrate en que sólo el deseo se convierte en salvedad, cuando el triunfo es como el mismo cielo y poder alcanzar es como poder alcanzar el éxito, ¿verdad que no lo puedes tocar?, pues, sólo tírate hacia el mar profundo, hacia el mismo hondo precipicio y hallarás la única salida que es la luz al final del abismo. Sólo pensando en el futuro crees en la oportunidad de ser por tí un buen ciudadano, un buen individuo y una buena persona. Sólo mirando tu porvenir sabes a ciencia cierta que el deseo se convierte en un sueño anhelado, real, y consecutivo en la proeza de saber que el destino es fuente de inspiración cuando ocurre la manera de saber que el futuro nadie lo tiene entre sus manos, sólo Dios. Y sentir que el anhelo es como el sueño idóneo, sin ser gorgóneo que maléfico hiere en el alma. Es como buscar una salida sin ser cierta. Cuando en la alborada se obtuvo a todo un sol siniestro y dando tanta luz como en los ojos la luz de la salida de aquel abismo. La tristeza es trascendental, inocua, e ineficiente, sólo recuerda sentir tristeza verdadera, pero, cuando la alegría es más hermosa y más real que te da la felicidad cuando abasteces de calma y no de estrés ni de ansiedad. Y saber que el silencio es como la misma paz que te da la vida misma cuando escuchas el silencio real entre lo que crees en ser y lo que no eres. Por lo tanto, si decides navegar por el mar recuerda que te puedes ahogar o no salir a flote si te embarga el pasado y el presente y no el futuro como proeza de una vida saludable. Recuerda reviviendo el pasado, viviendo el presente es que cuidas del futuro. Haz de la vida un verdadero camino, pues, el camino es real, y no un puente, camina dejando huellas y no montes a caballo dejando que las huellas sean del caballo y no tuyas, sino vive y tu vida vivirá más. Sólo haz del presente un buen camino y con el futuro siempre a cuestas de la pureza de tu propia alma. Sólo camina por donde nadie ha pisado, pues, no seas emulador que no somos robots. Piensa y sabrás que la vida es una, como una es la vida. Y pensando en el futuro te da la gran libertad de que seas tú y no otro. ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Éxito!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!