Que fuerte es la armadura que le has impuesto a tu corazón... grande ha sido tu dolor para tener tanto miedo a que alguien te quiera.
Déjame descubrir que es eso que ha marcado tu interior, que ha destruido las ganas y la voluntad de disfrutar la calidez de otro ser.
Dejame entrar y rogarás que me quede cada noche abrazar tus silencios, pedirás que desajuste tus pensamientos y te lleve hacia otra realidad... con amor
Te saciaré de caricias, te curaré con mis besos y será mi cuerpo y mi corazón la medicina para tu pesar. Déjame ser quien cuide de tus sueños sin miedo a que saquée tu destino.
Dejame entrar y conquistaré tu amor, te embriagare con mis besos y sanaré tu dolor.
Dejame entrar testarudo corazón.