Te deslizas sutil por mi ser
incrustándote en mis poros,
imagino tus besos rodando
por la piel, prendiendo luces
e incendiándome los sentidos.
Es tu amor bálsamo que revive,
tu fragancia asedia mis ánimos,
son tus brazos sol que me abrasa,
me haces desear no apartarme
de ti y me refugio en tu silencio.
Muy de mañana me sorprendes
ataviado del color esperanza,
transfiguras en luz mi rostro,
somos atemporales amándonos,
viviendo en nuestro edén soñado.