Reo soy de un amor afortunado
de la dama exquisita la mejor,
que no existe ni rey ni emperador
que pueda separarla de mi lado.
Que la gloria de ser por vos amado
no tiene parangón es superior,
que importa haber penado mi Señor
si recompensas todo lo pasado.
Querer es un poder justo y sensible
pretende más la gloria que la vida,
vencedor de una amor irresistible.
Dios la puso en la senda prometida
para forjar un sueño inaccesible
que magnifique mi alma agradecida.
Claudio Batisti