Ellie Woonlon

Poema a un sueño que olvidó

 

Quisiera....

... confrontar tus ojos y decirte todas mis dudas;

por ser curioso, comprobar tus actitudes presentes.

... siquiera estar allí, donde te encuentres,

para también hacer imaginarias las futuras.

 

Pero desde mi solitaria duna, opté ser fuerte.

Dije adiós a tu figura. Y  desde entonces la arena viene y se acumula,

no es mala suerte, ¿será que tu llanto llega, deshidratado, a sedimentarse con mi junta?

Desearía haber podido sincerarme, sin perder la ternura.

 

Haberte dado a entender mi rotundo rechazo hacia tu ente.

\"Lástima\", última palabra tuya ¿O era \"Lastima\"?

Mi honestidad, tan bruta, no siguió aquella estructura.

Y no lo haría, nunca. Porque así soy, diferente.

 

Ya no vengas hacia mí, no hay fortuna alguna.

Siempre seré fiel al habla que me mueve.

En este sitio ya no llueve, y como defensa,

 si un día aquí vienes y deambulas:

 

Por sentido común, como a mi carne nunca fuiste uña,

te empujarán lejos tormentas del desierto.

Lejos de aquí, para hacia mí enmudecerte. Lejos...

Qué amargura, de nuevo te pienso.

 

Oh, cierto que eres muy ligero.

Te arrastró un leve viento, volátil pensamiento.

Por fin, sólo escucho mis propios ecos.

Ellos son los que responden en vez de ti.

Es curioso, el sonido que me devuelve, tan fresco.

Es como mi sonoro reflejo, sí, pero sólo escucho,

con el oído perplejo, un feo canto desafinado.