AGUA QUE NO VUELVE.
Agua del río que al pasar,
nunca más suele volver,
tristezas que disipa la mar,
bebiendo su delta al yacer.
Al igual la nube al llover,
nunca más la misma será,
así un adiós sin querer,
igual que desamor dolerá.
Fuiste agua cristalina,
que dejé pasar sin beber,
como aquel trago de cantina,
con el que brindé por ti mujer.
Y desdeñé mi vaso vacío,
por tu cáliz rebosante,
de vino que no era mío,
pero que libé inocente.
Creyéndome tu amor,
mujer bella y galante,
tan solo fui tu amante,
y un engaño sin pudor.
Fui esa agua al pasar,
que no suele volver,
y tú: Vino sin libar,
que no vuelvo a apetecer.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Abril 29 del 2020.