Lo conocés una tarde por un minuto
Ahora es todo que tus ojos pueden ver
Un minuto y te da vuelta en la cabeza
La magnífica e improbable idea de que tal vez
Un día en que todo se dé de la forma correcta
Podría salvar tu mundo en un minuto
Hablamos de tu mundo
No es el mío no es el suyo
Solamente el tuyo
¿Salvar de qué?
De la maldad de la soledad
De la sobriedad del aburrimiento
De las barreras del conocimiento
De los demonios de tus sentimientos
En la oscuridad de una noche sin luna
Se enlaza un pacto con sangre
Noble sustancia de nuestra existencia
Arde, arde, arde al rojo vivo
Corriendo y ondeando
Marcando su camino sobre la piel
Como nuevos ríos sobre un desierto
Ríos que irrigan nuestras almas
Ríos del color del infierno
Dadores de vida y de muerte
De risa y de furia
A veces me llama la atención un suspiro
Sin saber si es real o qué tan real puede ser
¿Tenes ganas de saber quien soy?
Te cuento, te digo, ¿me escuchas?
Esto se trata de dar, amar y compartir
Muchas veces se pierde de esta manera
Más vale perder en vida que ganar en muerte
No sé mucho de nada y sé mucho de poco
Quién me hizo ser así te preguntaras
Pues nadie, yo sola caí en esto
Afortunada e ignorante
Pero no tan tonta
Sé que mi nube no es la realidad y que toda esta niebla me distrae de cosas que debería pensar y no quiero o no puedo
Pero mi nube es mía y es mi realidad
Se ve tan lindo desde aquí arriba
Los ríos son rojos y el desierto tiene corrientes
El sol brilla al mismo tiempo que la luna
Esta noche nuestro pacto sigue vivo
Y espero la salvación en un minuto