JoseAn100

La orilla de la brisa.

Busco la paz en la orilla de la brisa,

en la letanía de la cadencia de la rutina,

en el silencio cómplice de la vida,

en la marisma de la historia de la calma.


Prefiero seguir en mi cadencioso y humilde letargo,

ver cuchichear y zozobrar los insectos que pululan,

parecer tácitamente confiado y sereno en mi hartazgo,

ser mas de sorpresa, y de ataques sin esperanza ni sombra.


Si es absolutamente necesario ser un silencioso mercenario,

porque yo no comulgo con el sacrificio de los de abajo,

sacar, o escarbar lo necesario para mi punto de equilibrio,

y volver a mi rutina, a mi escritura, a mi propio criterio.


Si tengo que luchar con otro humilde mercenario,

pues lucho con decoro y adecuado cumplimiento en mi horario,

pero sin escudriñar ni intentar humillar su código templario,

al fin y al cabo el solo es otro humilde soldado desengañado.