Encanto de niña, libertad de mujer.
Flor de carne que se deshoja con el viento de la noche,
y que al mismo tiempo,
puede resistir la tempestad de una tormenta.
Corazón de cristal.
Alma de hielo y de fuego.
Nubes que se entretejen alrededor de un volcán.
Ojos como dos luces de estrellas.
Lágrimas como espinas que se entierran en mis manos
cuando las hago brotar…
Aliento de rosas.
Sutil silueta de tierra fértil.
Labios que navegan en agua dulce,
y lirios de sentimientos que crecen en ella.
¡Encanto de niña, libertad de mujer!
Sueños inusitados, deseos desmedidos, placeres desbordados.
Encanto, nobleza, ternura.
Libertad inmensa, llena de luz y de vida.
Y de Amor. Y de Amor para dar…