Tu sed me partió la boca.
Dejaste un rastro que tardará unos dias para que desaparesca.
Tus labios se acomodaròn tan bien a los mios que tengo escalofrío al pesar en tus besos.
Tus ojos hablaban con los mios, su lenguaje fue tan exquisito que sobraron las palabras.
Tengo miedo de perderme y no encontrar el camino de regreso hacia mi cordura, eres una bomba para mis sentidos y eso que cuando lo piensas te hace sonreír.
Algo de mi se quedó pegado a ti esa noche... y te juro que me da miedo... miedo a sentir tanto y que ese tanto me deje sin nada.
Tu sed me sacio el alma y las comisuras de mis labios.