WandaAngel

RECUERDOS

Con el dedal, hilo y aguja,

va zurciendo amores eternos, 

reméndando corazones 

a la sombra y el silencio. 

 

Bajo la luz de una vela,

teje incansable sus sueños, 

y suspira melodías 

que hablan ya de otros tiempos. 

 

Bajo el sol de cada día, 

cocina buenos soperos,

para alejar el hambre 

de los que habitan su reino. 

 

Y cada mañana temprano, 

se alza a encender el fuego,

para llenar de vida y aromas 

su rancho que es también su huerto. 

 

Así la mujer que es madre,

esposa de un viejo barbero, 

vive su vida sin penas

sembrando suspiros al viento.