*
Dónde encontrar a Dios,
aquí, en lo más íntimo del corazón,
pues, no siento nada,
Él no está en las tormentas,
mueve con su brisa suave
el rosal de tu ventana,
ahí, en cada amanecer,
pues, no siento nada.
**
Dónde estás Señor,
Dios del universo,
en el calor del sol,
en las primeras lluvias de junio,
en el “Dios te bendiga, hijo”,
“Bendición mamá”,
ahí está Dios,
pues, no siento nada.
***
Fácil decir que Dios está ahí,
“tan cierto como el aire que respiro”.
Tal vez yo estoy ciego,
no veo lo mismo que ustedes,
quisiera sentir la Presencia,
ese calor especial en el pecho,
quiero sentir esa alegría inexplicable,
esas ganas de gritar ¡Dios está aquí!
****
Tengo sueño,
llega la tarde,
ese otoño gris,
la quietud de las emociones,
quiero dormir,
el día ha sido largo,
y llego a la noche
con mis manos vacías,
tal vez, ustedes tangan razón,
y Dios está aquí.