Como espera el mar a la luna,
para beberla, en la madrugada,
así, así... nos fundimos
en la sed de las posibilidades;
pacientes...
Porque no es tiempo de pensar
donde nos desnudara el viento,
hay que quemar los miedos que nos sepultan
y llevarnos a la boca todo el amor que cae...
Aun no está la niebla en la percepción:
¡cerremos las ventanas ,que no entre!
Paciente... derrámame tu cuerpo ,
sembrado de estrellas, en mi vientre
y masajéame la vida en esta oscuridad agrietada.
Como la angosta parada por donde pasa la sabia,
así, así...ciérrate conmigo en gemidos del alma:
Pacientes...
Porque no hay tiempo para pensar
donde nos desnudara el viento.
Antonia Ceada Acevedo