Tras el rastro de esta noche,
la aurora vendrá sin prisa
desde un remoto horizonte
poblado de golondrinas.
Tan pronto cuando despiertes,
verás arder las mejillas
de la mañana imponente
brotando de la neblina.
Emergerás pura y leve
de entre las sábanas tibias.
Te sentiré transparente
por una vez en la vida.
Y enterrarás tus tristezas,
mis ilusiones vacías.
Si lloramos de nuevo que sea
por esta inmensa alegría.
Aquí tienes mis manos.
Basta que vueles con ellas.
Prolonguemos la noche en el alba
más allá de las estrellas.
Magnífica luna. Noche inaudita.
Golondrinas en la alborada
anuncian la luz
de un gran día.