Es inseguro lamer tu ternura
con aromas de café en casa
cualquier domingo de cellisca.
Es insegura tu voz escasa
En mi oído ,susurrando lilas malvas
Si estoy cansada y me amaneces.
Es inseguro mi pelo confundido
Tapando tu pecho ,tu latido
con el calor de un edredón de tibieza.
Es insegura tu pureza atesorada
Rodeando con sus brazos mi pecho,
La espalda y mis quietas alas.
Es inseguro tu nombre dibujado
En la mano de jugo que cae del monte.
Pero ,lo que es seguro es que hoy te siento
Y no quiero dejar escapar este sentir.
ANTONIA CEADA ACEVEDO