A mis amigos que adoro
por su amor a hacer el bien,
Que ya padres suelen ser
Responsables, generosos;
Yo le pido al Creador
Les dé la serenidad
De a sus hijos impulsar
A firme superación;
Nunca habrá mejor regalo
Que, a más de verlos crecer,
Verlos buscar siempre el bien
Con manifiesto entusiasmo;
Pero si algunos fracasan
Y se alejan del camino
No son renglones torcidos
Sólo están forjando su alma;
Y a los que están en mansión
En el camino hacia el cielo
Vaya este simple recuerdo
Lleno de un sincero amor…