Si acaso la naturaleza,
con toda su fuerza y su belleza,
se confabulara conmigo,
te mostraría vientos, tempestades,
pero también, gotas de rocío.
Se mostraría,
en la inmensidad de un cielo claro
o de nubarrones a veces lleno.
Te daría un gran calor,
para que, ante mí, te desnudes
o un frío de duro invierno
para que conmigo te acurruques.
Nos bañaría en aguas tranquilas
o nos llevaría por caudalosos ríos,
ya no estarías sola, ya no estaría solo,
estaríamos los tres, tú, yo y la naturaleza.
Alma Erótica
José Luis Agurto Zepeda
Managua, Nicaragua
20 de junio 2020