Juegos de sombras
debajo de alfombras
de verde espesura.
De su cintura
nidos de arroyos
forjan los hoyos
de aguas rellenas.
Sobre las venas
de las raíces
suaves matices
de luces leves.
Sonidos breves
como murmullos
son los arrullos
de la foresta.
Sigue la fiesta
con los trinares
con los cantares
con los chasquidos
y los rugidos
de los vivientes.
Sombras pendientes
de los ramales
se configuran
como señales
de melodías
todos los días.