Asklepios

De volver a tu encuentro

De volver a tu encuentro,

no me verás abrir el verbo llorar para ti.

Te miraré con mirada que rompe el tiempo

mientras las gotas de rocío pasan frío

en el jardín y el amanecer abre

sus ventanales a la tediosa

velocidad de la luz. Tan solo te diré que todavía

soy incapaz de olvidar ese morder el sabor a sal

de tus besos.