Embeleso del ayer
Llegó con ternura,
se ganó el cariño.
Un placer compartido
sin sentirlo se ha ido.
Al principio fueron
juegos de palabras,
conjugados con placer,
pero destinados a perecer.
Un embeleso agradable
se pegó a mi corazón,
extirparlo deseo, mas no sé
si es esa la idea de la razón.
Como siempre en mi vida
un adiós sin llegada,
una espera sin venida,
una flor sin primavera.
Una emoción de intenso colorido,
ilusiones, sueños y esperanzas.
Fue una aurora diáfana,
que alegró mi crepúsculo.
Fui osado, cobarde,
orgulloso, iluso, no sé…
Sólo sé que te amé,
aunque algún día te olvidaré.
Me desperté, grité tu nombre,
el viento llevó mi angustia,
volví a gritar ¡Princesa!
¡En soledad estoy sin ti!
Apenas contuve mi turbación,
la razón me dijo que así debió ser.
vivirá en cada amanecer,
el embeleso del ayer.