Han transcurrido no más de 10 Días que regresamos al trabajo , un pequeño negocio de productos mexicanos , después de más de 95 días en confinamiento causada por la pandemia que nos sigue azotando .
Lunes por la mañana, nuevamente el ruido al abrir las cortinas de hierro de mi tienda , sonido inconfundible que día a día está conmigo, nuevamente aquí, a iniciar con temor pero con mucha fe y esperanza
Iniciamos otra vez la misma rutina
Preparar el café mientras mi esposa va acomodando el pan , se antoja, se extraña , otra vez ese aroma del café recién hecho tal parece que fue ayer cuando cerramos.
A iniciar con sonrisas esperanzadoras, en mi barrio no ha sido fácil atravesar esta pandemia , mucha gente vive al día , sin querer , esa era nuestra plática al saborear nuestro café
Casi al medio día entra nuestro primer cliente del día, su cara de tristeza confundida con una leve sonrisa nos saluda, que gusto que ya estén de regreso espero que todo esté bien .
Yo que soy más parlanchín le contesto bien bien y ustedes ? ... el baja su mirada y me dice ... perdí a dos de mis hermanos
, aunque sabíamos que la situación fue muy complicada en este barrio .
Nunca estamos preparados para estas noticias, no supimos que decirle , solo se despidió y me dijo cuídense mucho, esto aún no termina
Al salir de la tienda mi esposa y yo nos miramos a los ojos y en silencio atónitos creo que se nos olvidó el café
Nuestra plática ya fue de la tristeza que se estaba viviendo aquí en este pueblo
y así transcurrió el día historias tras historias unas buenas otras malas , este barrio es uno de los más golpeados por este mal .
Ya casi al cerrar llego una señora con sus dos hijas , nos saludos y me dijo que bien que pudieron estar en su casa tanto tiempo cuidándose y no tuvieron que salir a trabajar.
Le conteste , no ha sido fácil para nadie mi hija se nos enfermo , es muy angustiante verla enferma por ese mal ,
ella hizo un silencio , y casi entre dientes me dijo , mi esposo murió , al principio me costó trabajo entenderla y me repitió mi esposo murió , sentí un escalofrío de pies a cabeza , me que mudo aún así le dije
! No puedo creerlo ! Ella entre sollozos me dijo perdió la batalla .
Era un hombre joven, sano y muy trabajador y no pudo con este mal , al despedirse nos dijo cuídense mucho este mal está en el aire
Nuevamente mi esposa y yo en silencio más incertidumbre que respuestas, más miedo que preguntas, no hay opción tenemos que seguir .
Extremar cuidados , tomarnos de la mano de Dios y continuar .
Primer día de trabajo , pocos clientes, más incertidumbre , y tenemos que seguir .