No hay noche más gris
Que la que me brinda tu ausencia
El silencio se adueña
Sin la suave vibración de tus palabras
El tiempo no es bello
Cuando falta el calor de tu cuerpo
El sentir de tus manos enredándome como hiedra
El reflejo de tus ojos a la luz de las estrellas
Eres como espiga en mi campo
Yo rosal floreciendo en tu pensamiento
Eres poema de amor y ternura
Eres eco en mi silencio
Me falta tu risa mañanera
Mi arena dorada
Me falta la extensión del cielo
De cuantas frases escucharon las estrellas
Cuando mi boca hablaba de un te quiero
Recordando cuantas palabras bellas
Formaron la luz de nuestro anhelo.
Tu ausencia es por siempre mi desvelo.