De pronto pienso… y me pregunto,
¿qué será de ti?, sin duda todo
debe trascurrir de forma tal
contigo y con quienes estén a tu lado
mujer, también estoy bien,
un poco añorando tus señales,
en paz, pero consintiendo mis penas,
buscando con desquicio a quien
podría pedirle que ocupe tu lugar
como compañera de los recorridos
en los puntos que solíamos ir,
¡ay!, qué momentos aquellos que vivimos...
o soñamos, o como sea que acontecieron,
hieráticamente este destino lo co-creamos;
no vuelas más hacia la ventana
dónde yo solía emitir mis cantos,
y aún emito sonidos sin mucha energía,
sin duda ya no conservo mis ruinas,
a cambio protejo mi nostalgia
tan sólo para darle sentido a mi hado,
manteniendo viva la esperanza
que todo trasciende ‘más allá de la muerte’,
y avanzo con cautelas poco a poco,
nadie más puede ser tú, no tienes remplazo,
dime… ¿tú aún quieres que te busque
o es mejor el silencio para este luto?,
mis acciones no deben asombrarte,
siempre contigo fui directo y sincero,
eres mi Reina y yo te amo,
y sabes que por siempre he de amarte.