Nos nacen ilusiones
que crecen como flor de primavera;
mas llegan nubarrones,
que cubren la quimera
con sombra que la vida nos lacera.
Se buscan nuevas metas
tratando distraer los pensamientos;
y siempre quedan grietas,
que quitan los alientos
al claro manantial de sentimientos.
Se sueña con afectos
que llenen de placer con su presencia;
y nunca son perfectos,
nos traen la dolencia
que sirve de calvario a la existencia.
El alma se enpecina
en dar con gran ardor su desvarío;
y nunca se imagina,
que un halo muy sombrío
podría oscurecer su hermoso brío.
En vano se ama tanto
buscando del amor su sinfonía;
y viene desencanto
con triste melodía,
a darnos un acorde de agonía.
Amor es un chiquillo,
que lleno de fulgor podrá vencerte
con ese lindo brillo
que trae mala suerte;
causando lentamente nuestra muerte.
Por eso yo prefiero
querer sin ataduras ni promesas;
oyendo los \"te quiero\"
repletos de finezas,
pensando son mi caja de sorpresas.
Yo nunca he de engañarme
creyendo que jamás vendrá el invierno;
que puedo despertarme
viviendo en el infierno,
aquello que pensé que era tan tierno.
Autor: Aníbal Rodríguez.