Me arrancaré el corazón
y las flores de otoño,
vaciaré el tintero
sobre los blancos folios.
Desterraré de mi frente
los castillos de naipes,
adormeceré la mente
con acupuntura barata...\"
Soy el novio de funestos vacíos;
el que recita versos muertos
a las paredes sordas,
el vagabundo de paisajes ruinosos,
tras cuatro estaciones de espera
entre áridas esperanzas.
Naufrago entre mis sesos
desconecto brumosas memorias,
rompo esquemas,
arranco recuerdos,
destrozo imágenes
de cuadros muertos.
Catastrófico es el despertar
cuando andas perdido
entre ruinosas callejuelas
y angostas avenidas
de acertijos sin descifrar.
Esclavo de mis caprichos
nada queda de mi espectral reino.