A la sombra de una roca estas
mirando en el horizonte
alguna luz, alguna sombra;
Quieto como esa roca
auscultas con obstinación
algún sonido tibio
navegando en el aire;
¿Por qué aun estas aquí?
¿Por qué esperar aún en el silencio?
Cuerpo desarmado y perecido en la fe
de una esperanza;
¡El amor aún está dentro de ti!
¿Por qué llorar, por lo que se hizo eterno?
¿Por qué esperar a lo invisible y sin dolor?
La llama de ese amor,
pervive en el universo como astro
que parpadea en una luz,
en esta noche de diciembre.