Tan hermosa, tan radiante,
más que un bruto diamante.
Es así como te veo,
día y noche mi cielo.
Más lindo que ver un amanecer,
son tus ojos cafés.
Achinados como ninguno,
me causan amor profundo.
Que alegría vida mía,
poder contar con tu sonrisa,
y más poder generarla yo,
ya que es todo un esplendor.
Doy gracias a Dios,
por esta hermosa creación.
Que en mi vida la dejo,
para arrebatarme el corazón.