Hola; cuéntame ¿cómo te va la vida?
¿Qué tal el aislamiento?
¿Has logrado escapar de esta pena masiva?
O es brutal remolino que se traga el día, a día.
Dime, hablemos sin reparos
¿Te miras al espejo, vives en el pasado?
O aun sostienes el sueño de un futuro dorado,
cuanto tiempo perdido, corazón torturado
Llevamos un tesoro guardado en los bolsillos,
Y no lo valoramos, solo es juego de niños
el presente avasalla los mejores momentos
el futuro, utopía, una burla del tiempo.
Baila la incertidumbre, se cancelan los besos,
el abrazo es historia que parece un exceso,
la palabra se torna presurosa y esquiva
anda, dímelo ahora ¿esto sería la vida?
Ha nacido una brecha profunda, quejumbrosa,
escasean las caricias, se marchitan las rosas
Y renacen los miedos ancestrales, difuntos
estamos indefensos ante un fantasma astuto.
Cuéntame tú que puedes con el verbo calmado
con el verso sentido, con el alma en la mano,
vamos a proteger la frágil florecilla
que sobrevive aun tras la pantalla fría.
Extendamos la mano de tu puerto a mi playa
que sea la esperanza verde azul de las aguas
una brisa de paz y bienaventuranzas
sea el futuro dorado del que siempre me hablabas.