Asklepios

Cuando la verdad quedó encerrada en el alma

Cuando la verdad quedó encerrada en el alma

surgió espontánea la pureza de la fiesta:

Clamores y sonrisas multicolores

batidos entre líneas

por el aire; frenética algarabía

derramada y desentendida…

Sólo pude retener la sospecha de sus

huellas desde la torre más alta de la

tragedia.