Nunca pensé morir de Amor y mira por dónde me estoy muriendo ahora, sabes de sobra que siempre he sido una cigarra y he dejado mi canto a un lado para amarte por horas
Quisiera comprarte la Luna, pero me ha dicho el Sol que es su novia
Así pues, he pensado que me gustaría regalarte una Rosa aunque pensándolo bien si la arranco de su tallo morirá muy
triste y sola.
No puedo cómprate nada que se me ocurra, pues tú ya por ti misma
eres la más bella de las Joyas.
Me gustaría volar por los Cielos contigo para que no te acordaras de esos pensamientos malditos que te persiguen a todas horas.
Pero fíjate que cosas pasan, las alas que guardaba en mi armario de la esperanza, al abrirlo ya no estaban, realmente no sé quién ha podido llevárselas, en este justo momento en que tanto las necesitaba.
Aunque tengo una idea, a lo mejor te podrías relajar apenas un instante, si me das un abrazo con cariño fingiendo que que eres mi amante.
Vale de acuerdo, ya no digo nada más, me siento en el sillón del silencio, me fumo un cigarro mientras te miro, que guapa eres condenada, contigo me perdería en el mar mirando las estrellas y tiraría al água las coordinadas a propósito para contarte por las noches alguna que otra de mis pérdidas antiguas batallas.
No te aburrirías, te lo garantizo, son divertidas, además les echo un poco de azúcar y canela para que sepan más dulces y divertidas.
en realidad lo único que persigo es que me mires con esos ojos que tanto me gusta su brillo.
No quiero ni necesito más, me conformo con que seas mi amada amiga, los besos, la piel, las promesas, el amor eterno, son solamente palabras que se las lleva el viento.
Yo me guío por los hechos, todo lo demás no son mas que mentiras ilusiones y sueños perdidos.
Mael Lorens
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de Autor 13/07/2020