Santo Tomás
Llagas y clavos en sus manos y pies,
“mete el dedo en la llaga Santo Tomás”,
ver para creer son tus ojos de incrédulo,
cuando no fue el calvario fatulo,
¡es Jesucristo, el Cristo Rey!,
el que vive y vivirá por los siglos,
cuando es Él toda ley,
cuando por tí y por mí nos salvó,
yá es historia, pero, no se olvida,
pues, es Él, es Él quién nos ama,
yá es gloria, que por los siglos reinará,
cuando Él, es Él quien regresará…
Judas Iscariote
“Ven conmigo Judas Iscariote,
pues, tu vida está unida a la mía”, dijo Jesús,
cuando por treinta monedas,
vendiste al hijo de Dios,
¡Oh, Judas Iscariote arrepiéntete!,
pues, con una soga al cuello moriste,
si Pedro me negó antes,
si Poncio Pilato se lavó las manos,
de ésta sangre que se derramó,
como un calvario por el pecado,
pues, no será en vano la crucifixión,
cuando en el corazón fue la pasión,
¡ay, Judas Iscariote!, más Jesús dijo “La vida no me la quita nadie,
sino que yo la doy…”.