La ciudad te ofrece
lujos vanos, comodidades;
te aumenta la sed de oro
y las vanidades.
La ciudad te brinda
la cultura del cemento,
allí abundan los tesoros,
mas no los sentimientos.
La ciudad construye
edificios y torres,
el progreso acaba
con los corazones nobles;
allí todo se amuralla,
hasta las pasiones
y abundan los canallas
por todos los rincones.
Allí casi todo tiene
el corazón de piedra,
se ven muchos cristales
... ninguna estrella;
verás muchas sonrisas
... pocas sinceras
y una vez que mueras
olvidarán quién eras.
La vida no vale nada
mas sí lo que poseas,
te parten el corazón
sin importar quién seas,
con balas blindadas
o con hojas de acero;
la ciudad es un huracán
con \"ojos de hielo\".
Que tristeza siento
por esta ciudad,
el odio aumenta
... el amor se va;
¡huyan pronto
quiénes puedan huir!
¡nunca lleguen
quiénes piensen venir!
xE.C.