Edel Vicente González Pérez

Confinamiento

Aquí, en el cajón adosado,

ante el atardecer

y los colmillos afilados del tiempo,

en estadio de prisionero

o de triste desempleado,

alimento la esperanza.

 

El mundo añora el alba;

la obsesión por la victoria

recrudece la prevención

y no hay día en nuestro día

que el COVID no ensombrezca.

 

Sinuoso enemigos nos acecha,

nos encierra, nos asfixia

y amenaza con sumergirnos

en la sima más oscura.

 

El estado de sitio durará

hasta abatir al rival,

mientras, la vida se torna tiempo:

memoria de los inicios

olvido del final.

 

Hago oídos sordos a ecos

homéricos, a relatos efectistas

de los medios del miedo

en pos de la renta

de gacetas, bulos y flecos.

 

Cuento las losas del salón

describiendo círculos giratorios,

como el tiovivo de feria,

siempre en movimiento y diversión.

 

Y con la gente ahí afuera

avíos, apoyo, ilusión

y esta vida plena

acoge una estrella cercana.

 

19-3-2020