Esa estrella tiembla curiosa
en universo propio. Se me
expande dentro como gala
xia en sangre. Va tejiendo
sus líquidas redes bajo piel.
Vuelos y telarañas de aire
flotan lúdicamente.
Relojes de agua marcan
el ritmo de las horas que
nos llueven.
También indago piedras
grandes y pequeñas da
das a mirame para sacar
conclusiones. Por allí viene
el roble antiguo a saludar nu
estro devenir reclamando un
as palabras de aliento
Todo sucede en modo sueño
mientras Tierra viaja a fantás
tica prisa