Oigame señor del sombrero blanco,
arden las pieles bajo el sol de marzo,
cruje la osamenta en la cuadrilla
mientras incesantes se trasiegan
las viles monedas en sus bolsillos.
Y no quiere que levante la voz? .
Mire elegante doctor de la ley,
la señora de los ojos vendados,
adulterado el fiel de su balanza
yace amordazada y morinunda
en las mandíbulas de un juez.
Y no quiere que levante la voz? .
Vea poderoso señor del agua,
solo llueve del lado de los suyos
cuando en la sementera del pobre
crispan las yapanas de lomo gris,
muere sin fin la semilla sedienta.
Y no quiere que levante la voz? .