no
no me sale reír y se queda
sin nombre el azúcar que damos
a qué hora quedamos... vendrán después
de darse cuenta
cómo me han estrangulado
no reflejo más
soy el padre soy la madre
soy el hijo que vivirá
en el ADN de las plantas que me quieran
seré
lo mismo que alimenta
la levadura un estruendo
sedado
las historias para volar
se van programando
ya tengo alucinaciones de Dios...
se ha quitado el delantal
pero el dolor sigue
mordiendo
y hay muchos momentos subrepticios
el alma lo encara como un pez
la materia
atrae moscas hambrientas
y me voy
como el cabello detrás de las vértebras
de una chica
indefenso
como un periodista
inmolándose a las tres