Entre tanta gente buena
nunca falta algún rufián,
sus motivos ya tendrán
para purgar su condena;
mantén el alma serena
si te piden, dales pan,
pues jamás entenderán
que no existe gente ajena;
es para ellos la hermandad
algo que no puede ser,
pues vivieron la orfandad
el olvido, el padecer;
creen hallar felicidad
en demostrar gran poder...