Dos cuerpos
Como quisiera no recordarte,
mirándome ante el espejo
que a dos cuerpos deleitó.
No sentir ese aroma a romero
que en puntilla pegada a ti
hasta de momento percibí
granizos tibios de sensaciones
muy placenteros, hoy se pierden
por el deshecho del adiós.
Y hoy miro ese espejo empañado,
parece que el sabor de engaño
la pupila ha dilatado. Le cuesta ver
la suciedad que le cubre, por padecer
recordando brillando dos siluetas,
deseo desbordante en hombre y mujer.
No espera el día con esa sonrisa
que le enseñaste tener,
Hoy el espejo es mi rival,
mira mis sombras con ironía cruel.
Las cicatrices son tan hondas
que aunque quisiera
no las alcanzas
en seda blanca envolver.
No es mi cómplice, tampoco el amigo,
le he tapado con besos hasta las cornisas
sellando mis dedos... rúbricas de deseos
y al recuerdo le he vestido de oscuro papel.
NC 24-7-2O2O