Matías García Fernández

Tu invierno jovial

Me invades la mente como la niebla a la ciudad. Y al revés del invierno, haces tibio y perfecto el lugar.
Al invierno le daré tus horas, le pondré tus colores para verlo gozar.
Abraza la niebla cada rincón de mi ser sin disimulo y va queriéndome enfriar.
Tu mirada de perla es un rayo detrás de la cortina que arrastra el viento y me quiere llevar.
Brasa de esperanza eres a mis crueles y frescas albas en este invierto jovial.
Detrás de la blanca y fría mañana está tu sol, mi luz; tu calor.
Eres el sol en este invierno jovial.